Artículo de Gabriel Llobera, presidente de ACH: "Una nueva oportunidad para diseñar una política turística de éxito"
Opinión
Artículo de Gabriel Llobera, presidente de ACH: "Una nueva oportunidad para diseñar una política turística de éxito"
21-05-2019
"Llevamos demasiado tiempo hablando de la inversión que debe realizarse en las zonas turísticas. Es una prioridad absoluta"
"Es primordial mantener un diálogo y colaboración permanente con el sector privado, que haya un entorno político-administrativo estable que otorgue seguridad jurídica"


Recién celebradas las elecciones generales y a las puertas de las autonómicas, municipales y europeas, me parece oportuno trasladar a los partidos políticos que concurren a los comicios algunas consideraciones que deberían incorporarse a la política turística, si queremos mantener el liderazgo de España y de las Islas Baleares.

Las directrices políticas en materia turística deberían emular a las acciones empresariales, que se caracterizan por su eficacia y por su contribución al desarrollo y bienestar colectivo, gracias a haberse orientando en el momento oportuno, cuando los vientos soplaban a favor, hacia una apuesta firme y decidida por la calidad y la aportación de valor.

Sin duda alguna, una de las premisas fundamentales es que la política turística debe formar parte de un pacto de Estado entre todos los partidos que integran el arco parlamentario. La importancia de la actividad turística y su contribución al PIB (12% en España y 45% en las Islas Baleares) obligan a conferir al turismo un tratamiento prioritario y no estar sometido a los vaivenes políticos con cada cambio de gobierno. En este sentido es necesario establecer de forma clara cuál es el modelo por el que se va a apostar y cómo va a gestionarse. Y esto es válido tanto a nivel estatal como autonómico.

Es prioritario mejorar la coordinación entre las distintas administraciones,   establecer las sinergias necesarias, que haya un entorno político-administrativo estable que otorgue seguridad jurídica, simplificando los trámites burocráticos y disminuyendo las cargas administrativas, aligerar las cargas fiscales a las que están sometidas las empresas, diseñando un sistema más orientado a incentivar el crecimiento económico que a lastrarlo, y propiciando finalmente una gobernanza multinivel capaz de optimizar los recursos económicos públicos. Es primordial mantener un diálogo y colaboración permanente con el sector privado, centrándonos, sin lugar a dudas, en la formación del capital humano y la sostenibilidad, con el objetivo de mejorar el entorno de negocio, la  productividad y la competitividad.

En muchas ocasiones, desde el sector hotelero balear, se ha reivindicado que habiéndose llevado a cabo en los últimos siete años una reforma sin precedentes de la planta hotelera, iniciada por las cadenas hoteleras y a las que se sumaron otros muchos establecimientos independientes, logrando reposicionarnos y alcanzando mayores niveles de rentabilidad, se ponga freno a esas inversiones, que han sido un referente en toda España y  punta de lanza para que otros destinos se sumen al carro de la modernización.

Es imprescindible recuperar con carácter urgente la normativa que lo posibilite sin que haya un horizonte temporal limitante, pues las empresas debemos renovar periódicamente el producto y no debe ser “una fecha de caducidad” la que condicione nuestra evolución. Y, esa ola de transformación, debe trasladarse también a la oferta complementaria que aún no se ha modernizado y precisa un impulso, sin olvidar la necesidad acuciante de regenerar los espacios públicos.

Sinceramente, llevamos demasiado tiempo hablando de la inversión que debe realizarse en las zonas turísticas. Es una prioridad absoluta, y la administración ha dejado pasar la oportunidad, que los empresarios sí hemos aprovechado, para acometer, en los años de bonanza, las obras públicas precisas para situar a nuestros destinos en un nivel óptimo tanto en infraestructuras como en servicios.

Este ejemplo que he citado es uno de los muchos temas que los nuevos gobiernos que se conformen a nivel estatal y también autonómico, deben afrontar sin pausa y con prisa.

Ahora que vemos como múltiples amenazas se ciernen sobre el sector turístico español, no podemos consentir que la desidia de la administración ponga en riesgo nuestra industria. En tiempo de campaña todas las fuerzas políticas prometen enmendar los errores y retrasos del pasado, pero no nos podemos conformar con promesas, hay que pasar a la acción desde el minuto uno de la próxima legislatura.


"Todos, sector empresarial, sociedad civil y administración, hemos de trabajar en pro de unos objetivos comunes que no nos mantengan en el vagón de cola en el que venimos transitando estos últimos años, en los que las Islas Baleares han caído en picado"

Quiero poner el acento también en la política europea, es necesario tener altura de miras e ir más allá del horizonte balear y español, para lo cual es imprescindible que se configure un plan de trabajo con la Unión Europea en los temas que competen directa e indirectamente a la actividad turística.

Desgraciadamente Europa no figura en los discursos de los candidatos. El programa de los partidos, más o menos adornado dependiendo de cada formación, se circunscribe a su ámbito territorial sin contar con una visión más global. Hay una tendencia generalizada a obviar propuestas, retos y metas que deben plantearse en el Parlamento europeo, cuando, lo cierto, es que su influencia es inmensa.

Desde esta tribuna, no quiero enumerar todos y cada uno de los puntos en los que hay que trabajar con ilusión, empeño y obsesionados con obtener resultados positivos. Quiero aprovechar para lanzar un mensaje, recordando que tenemos una nueva ocasión para ganar el futuro, y para ello tenemos que aplicarnos. Todos, sector empresarial, sociedad civil y administración, hemos de trabajar en pro de unos objetivos comunes que no nos mantengan en el vagón de cola en el que venimos transitando estos últimos años, en los que las Islas Baleares han caído en picado desde las primeras posiciones que ocupaban en el ranking del PIB per cápita nacional. Aspiremos a ser de nuevo la locomotora. No desperdiciemos la oportunidad.